Construcción de un stand: 3 Consejos para transmitir tu marca. Del 2D al 3D.

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Un stand es un espacio de comunicación efímero que da voz a una marca dentro de un contexto de ferias de un sector determinado. Debido a esto, la construcción de un stand se convierte en el mejor escaparate de una compañía para que, desde bajo su visión estratégica, (siempre al servicio de la marca y de los objetivos de negocio) se presente la marca corporativa de una forma innovadora y relevante en un periodo de tiempo muy acotado consiguiendo un gran impacto. Pero ¿Cómo conseguir esto?

 

Tu stand refleja la personalidad de tu marca

 

Las marcas reflejan una personalidad, contamos incluso con arquetipos que nos ayudan a poder distinguir los rasgos más relevantes o diferenciadores en función de su tono, actitud… pero ¿y la arquitectura?

Filósofos de gran influencia en el siglo XX, como Edmund Husserl, Martin Heidegger y Maurice Merleau-Ponty le dieron su impulso inicial a la fenomenología, que en la década de 1950 comenzó a aplicarse en arquitectura. Obras como Los ojos de la piel de Juhani Pallasmaa o Atmósferas de Peter Zumthor reflexionan en profundidad sobre la experiencia de la arquitectura a través de los sentidos. Es decir, el color, las texturas, formas y proporciones juegan un papel igual de importante en lo que transmite tu marca tanto en 2D como en 3D.

Los análisis perceptivos pretenden llegar a extraer conclusiones sobre porqué nos sentimos de forma diferente analizando las características (atmósferas) del espacio que nos rodea. Por ejemplo, si tu stand está basado en formas arquitectónicas curvas, luces tenues, cambios suaves en la pendiente, techos bajos y materiales cálidos (como madera o textiles), te estarás posicionando con un discurso perceptivo amable y acogedor. Es decir, cada elección construye literalmente la percepción que el usuario tendrá de tu marca: “Es tan importante lo que dices como lo que no dices”.

 

Experiencia inmersiva e inolvidable

 

Transformar tu marca en un espacio físico real tiene muchísimo poder, ya que como acabamos de explicar, supone la traducción de un imaginario conceptual a decisiones físicas tangibles, es decir, supone pasar del mundo de lo intangible al mundo de lo perceptivo, de lo que se piensa a lo que se toca. ¿Qué puede provocar un mayor impacto en el usuario que “pasear” literalmente por tu universo de marca?

Un buen ejemplo de ello es la primera tienda en Londres de L’Occitane en Provence’s, que con sus instalaciones botánicas integradas potencia el producto y crea un ambiente inmersivo único inspirado en la Provenza y el sur de Francia. Futurebrand conseguía así compartir la filosofía de la marca “la belleza de la vida” con los visitantes más curiosos.

Todos, aunque no seamos plenamente conscientes de ello, somos increíbles planificadores de espacios y generamos experiencias distintas según el público al que nos enfrentamos. ¿A caso preparas igual el salón de casa si tienes una reunión familiar que si vas a hacer una fiesta con amigos? Acabas de planificar un customer experience journey y tú sin saberlo.

Estar seguros de que nuestros invitados se sienten cómodos durante la visita se convierte en un punto clave en el diseño. La experiencia deberá ser totalmente accesible, ya que el stand como punto de contacto directo entre marca y usuario debe mantener una actitud de bienvenida y apertura. Teniendo esto en cuenta, podemos entender que construir un stand se transforma en diseñar la experiencia inmersiva y la sensación que quieres que quede en el usuario una vez ha dado un paso fuera, ya que, debido al carácter efímero de estos espacios arquitectónicos, esto será el auténtico remanente que aportará valor a tu marca.

 

Diferencia tu marca con un diseño creativo

 

Si una marca posee una base conceptual y de posicionamiento sólida, estará más preparada para diversificarse, crecer y generar nuevas oportunidades. Exactamente lo mismo sucederá con el diseño de un stand: Si las primeras decisiones de diseño recogen todos los conceptos estratégicos de forma coherente, integrándolos con la planificación perceptiva, espacial y funcional, entonces tendremos una base sólida que nos permita enriquecer la experiencia y amplificarla.

En este contexto, Hoteles Silken es un claro ejemplo de marca que ha sabido capitalizar la oportunidad que representa este punto de contacto, tomando decisiones que refuerzan los valores deseados, como apostar por incluir actividades sensoriales integradas en el espacio, implementar tecnologías como la instalación de un ‘photocall’ que abría un concurso en las redes sociales, e incluso ofreciendo listas de música relacionadas con sus destinos que potenciaban la experiencia.

En un mundo tan globalizado y lleno de estímulos es muy importante entender que un stand supone un momento de pausa en el que logramos que el público nos preste una atención dirigida, sumergiéndose por completo en nuestra marca. Debido a ello, la oportunidad expositiva y comunicativa que supone la traslación de marca a un stand ofrece el escenario perfecto para divulgar y comunicar tu ‘expertise’, pero también para sorprender al cliente con algo nuevo, amplificando tu posicionamiento con una experiencia multicanal y aportando un giro creativo que transmita alto y claro el mensaje de marca.

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